K ANTUNILKÍN, MX.- Al combinar la idiosincrasia religiosa con la cultural, los lazarocardenses dieron inicio a la Feria en Honor a la Virgen de la Inmaculada Concepción, con el corte de la ceiba sagrada, la que es llevada a la iglesia y luego sembrada en el ruedo de la Plaza de Toros.

Con la bendición de un sacerdote maya, la presencia de los diputados de la Feria y las autoridades municipales, el pueblo acudió al corte del árbol de la ceiba, donde el primer hachazo lo dio el presidente municipal Josué Nivardo Mena Villanueva, para luego seguir las demás personas hasta el momento de cortarlo por completo.

Posteriormente fue cargado en hombros en un recorrido de unos cinco kilómetros, del terreno a la iglesia y de la iglesia al Parque de Feria.

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La comitiva estaba compuesta por el Presidente, regidores, funcionarios públicos, organizadores de la Feria y el pueblo, donde convivieron al ritmo de la música tradicional.

“Son las tradiciones de nuestra cabecera Municipal, la celebración de los 166 años de haber sido fundada; recordemos que la ceiba es el árbol sagrado de los mayas; para que nos vaya bien en las cosechas le pedimos permiso a la madre tierra para hacer la celebración”, explicó Nivardo Mena.

Las celebraciones durarán 12 días a partir de hoy, donde las actividades de inauguración concluyen por la noche con la tradicional vaquería y el baile de la jarana en la Plaza Central. ( Agencia SIM )