En los últimos meses, investigadores y asociaciones apícolas han reportado un incremento notable en la mortalidad de abejas en diversos países europeos. El fenómeno, que se ha venido intensificando de manera progresiva, está relacionado con una combinación de factores que incluyen el uso de pesticidas, la reducción de flores silvestres, la expansión urbana y los impactos cada vez más evidentes del cambio climático.

Las abejas, responsables de polinizar una gran parte de los cultivos y plantas silvestres, juegan un papel fundamental en la seguridad alimentaria del continente. Su desaparición afecta directamente la producción de frutas, verduras y semillas, y amenaza la estabilidad de numerosos ecosistemas. Los expertos señalan que una caída significativa en estas poblaciones podría traduci

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