El futuro del Sol siempre ha despertado curiosidad y, a veces, temor, sin embargo, los modelos más recientes no predicen un final violento, sino un proceso prolongado donde la estrella cambia, se expande y modifica para siempre el rostro del Sistema Solar en una transformación inevitable.

Aunque parezca una idea lejana, su envejecimiento ya está escrito en la física estelar. Sabemos que cada estrella nace, crece y consume combustible, y nuestro Sol no es la excepción, las simulaciones muestran cómo su brillo aumentará lentamente, marcando el inicio de una etapa que transformará profundamente su entorno cercano.

Con el paso de miles de millones de años, la fusión de hidrógeno disminuirá y el equilibrio interno se romperá. Ese desequilibrio hará que la estrella empiece a expandirse, camb

See Full Page