En una noche cargada de emociones contrastantes, Ángela Aguilar demostró la solidez de su base de seguidores al lograr un lleno total en su reciente presentación, desmintiendo así los reportes y rumores que circularon durante días sobre una presunta baja venta de boletos.

El momento cumbre: gratitud y lágrimas

El instante más conmovedor de la velada ocurrió cuando la intérprete de “Qué Agonía” detuvo su actuación, visiblemente conmovida por la respuesta del público. Ante un recinto abarrotado que coreaba al unísono “¡No estás sola, no estás sola!”, la hija de Pepe Aguilar cayó de rodillas en el escenario, llevando sus manos al rostro en señal de agradecimiento y vulnerabilidad.

Este gesto fue interpretado por los asistentes y la prensa como una catarsis ante la intensa ola de críticas y

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