El mes pasado, Alejandro Diego Rosell —consultor energético, profesor y analista con más de una década en el sector fotovoltaico— descubrió algo que no encaja con lo que todos creemos sobre la energía solar: su balcón produjo el día más alto de generación del año y también un día de cero absoluto. Mismo mes, misma instalación, pero resultados opuestos.
La paradoja no es un fallo: es exactamente cómo funciona un balcón solar en una ciudad real. Y lo que revela su caso desmonta buena parte de los mitos del autoconsumo urbano.
El fenómeno del balcón solar. La explicación empieza por una frase que Diego repite en la entrevista que nos ha concedido en Xataka: "El rendimiento real depende más del ángulo, la sombra y la geometría del edificio que del mes del calendario". Sus paneles están in

Xataka

ABC News Video
Women's Wear Daily Retail
Raw Story
New York Post