La ola de extorsiones en Lima volvió a dejar una escena tan peligrosa como absurda: un extorsionador terminó disparando accidentalmente a su propio cómplice mientras grababan un video de amenaza dirigido a una presunta víctima. Las imágenes se viralizaron rápidamente y generaron alarma entre usuarios y autoridades.

El hecho se da en un contexto de incremento sostenido de actos extorsivos que afectan a transportistas, comerciantes y empresarios en todo el país. Las mafias suelen enviar videos intimidatorios mostrando armas de fuego para obligar al pago de cupos.

En esta ocasión, uno de los delincuentes, con el rostro cubierto, manipulaba una pistola cargada mientras grababa el mensaje. Al intentar vaciar la cacerina sin verificar la recámara, disparó accidentalmente, hiriendo al cómplice

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