El ministro del Interior, Armando Benedetti, ha revelado que es víctima de un presunto espionaje, lo que ha generado gran preocupación en Colombia. Benedetti, quien es cercano a la directora saliente del Dapre, Angie Rodríguez, ha indicado que un investigador privado confirmó que sus comunicaciones han sido intervenidas.

La investigación sobre el teléfono del ministro comenzó el 28 de noviembre. Un sistema extranjero, que se aplicó durante 24 horas, detectó huellas de la última versión del software Pegasus. Benedetti ha expresado su desconcierto ante esta situación, afirmando que aún no entiende las razones detrás del espionaje.

Milton Hernando Cuadros Peña, el investigador contratado por Benedetti, explicó que el software en cuestión fue creado para combatir la criminalidad y el terrorismo. Sin embargo, sugirió que es probable que el espionaje provenga de alguna entidad gubernamental, aunque no se puede determinar con certeza su origen.

La denuncia de Benedetti se produce en un contexto tenso, ya que Angie Rodríguez también ha sido objeto de amenazas. Hace 11 días, su casa familiar en Bogotá fue violentada por hombres no identificados, quienes ingresaron a la fuerza y destrozaron el lugar, aunque no se robaron nada. Rodríguez ha manifestado su temor por su seguridad tras dejar el cargo y ha informado a las autoridades sobre el incidente.

Hasta el momento, ni la Unidad Nacional de Protección ni la Dirección Nacional de Inteligencia han hecho comentarios sobre estos hechos. La Fiscalía General de la Nación deberá investigar ambos casos para determinar si están relacionados o si son incidentes aislados.

Una fuente de la Casa de Nariño ha indicado que, si se comprueba una conexión entre los dos casos, podría interpretarse como un mensaje dirigido a Benedetti y Rodríguez, quienes han influido en decisiones importantes del presidente Gustavo Petro. La coincidencia en la revelación de ambas denuncias ha suscitado interrogantes sobre la situación actual en el Gobierno.

Cabe recordar que en junio de 2024, la primera dama, Verónica Alcocer, presentó una denuncia ante la Fiscalía por una supuesta campaña de desprestigio originada desde el interior del Gobierno. La situación actual plantea serias dudas sobre la seguridad y la estabilidad de los funcionarios cercanos al presidente Petro.