LOS cambios de opinión del presidente –sean ciertamente un giro de criterio o el habitual eufemismo para dulcificar uno de sus embustes– son frecuentísimos. Pero pocos tan evidentes y tan próximos en el tiempo como el que acaba de protagonizar Pedro Sánchez respecto a los compromisos adquiridos con Junts en esta legislatura inviable. El jueves seis de noviembre, el jefe del Ejecutivo le respondió al diario El País –que lo difundió dos días después y el domingo siguiente en formato impreso– que su Gobierno había hecho todo lo que dependía de sus competencias para cumplir con los conmilitones de Carles Puigdemont. El pasado martes, dos de diciembre, en una entrevista en La Moncloa para el programa que Gemma Nierga presenta para el circuito catalán de TVE –aunque se emitió para toda Españ

See Full Page