La Administración estadounidense calificó a The Washington Post como el "delincuente mediático de la semana", tras publicaciones en las que sostiene ese diario que el jefe del Pentágono, Pete Hegseth, habría ordenado matar a los sobrevivientes  después del primer ataque contra una supuesta "narcolancha" en el mar Caribe, ocurrido el 2 de septiembre.

"The Washington Post publicó esta afirmación sin fundamento con el fin de desacreditar a los combatientes estadounidenses y avivar el sentimiento antiestadounidense", reza el comunicado , en el que se resalta que se trató del primero de una serie de ataques letales contra "organizaciones designadas como terroristas".