Durante la tarde de este viernes, en la explanada exterior de la Fiscalía de Distrito Zona Norte, que la conecta con los juzgados civiles, se apostó un grupo de menores de edad uniformados con una jersey blanca, números grandes en color rojo y resaltando la palabra “Juárez”, mientras que en la parte trasera lucen el apellido de cada uno de sus portadores.

A la vez que la tarde comienza a caer en la frontera, ellos juegan pasándose la pelota de un lado a otro, al mismo tiempo que sus padres los observan desde una jardinera y, a su alrededor, decenas de abogados entran y salen de Fiscalía o de los juzgados.

Los adultos tienen una mirada de decepción y tristeza porque sus hijos no deberían estar ahí, esperando a ser atendidos por las autoridades, ya que habían logrado su clasificación al

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