España ha vivido un cambio histórico en su balanza comercial: China ha superado a Alemania como principal país proveedor , tras consolidarse durante cuatro meses consecutivos —de junio a septiembre de 2025— como el mayor origen de importaciones.

Según los datos del Banco de España recabados por The Objective , en ese periodo las importaciones chinas alcanzaron los 16.965 millones de euros , frente a los 16.257 millones procedentes de Alemania . El mayor diferencial se registró en agosto, cuando las compras a China sumaron 3.725 millones , superando con claridad los 3.152 millones procedentes de Berlín.

Factores clave: tecnología y comercio online

Entre las razones de este vuelco comercial se encuentra el peso creciente de tecnologías como las de Huawei , y especialmente el auge del comercio electrónico de origen chino , liderado por plataformas como Shein , Temu y AliExpress . Estos gigantes han transformado el panorama del consumo en España, generando también preocupación entre autoridades comunitarias y comerciantes locales por sus prácticas de venta y su crecimiento imparable .

La Comisión Europea ha abierto una investigación formal a Shein por presunta utilización de tácticas comerciales desleales , incluyendo descuentos ficticios y presión psicológica para fomentar compras impulsivas.

Tendencia en ascenso durante los últimos años

Ya en 2022, China superó a Alemania como principal proveedor anual, y la evolución de 2025 apunta a repetir ese resultado. Aunque en el acumulado de enero a septiembre Alemania aún mantiene el liderazgo por un estrecho margen (37.344 millones frente a los 36.836 millones de China), la tendencia mensual indica una inversión progresiva en favor del país asiático.

Mientras tanto, Estados Unidos , afectado por su guerra comercial con China y sus tensiones diplomáticas con España, ha visto estancarse sus exportaciones , que alcanzaron los 23.391 millones en los primeros nueve meses del año.

Geopolítica y vigilancia digital en el centro del debate

Este cambio de eje económico se produce en pleno caso Huawei , con advertencias de Estados Unidos y la UE sobre el posible riesgo de ciberespionaje. La Comisión Europea ha instado a España a romper lazos tecnológicos con empresas chinas consideradas de “alto riesgo” y ha aprobado una estrategia para reforzar la soberanía digital del continente .

A pesar de ello, el Gobierno de Sánchez ha estrechado lazos con Pekín, algo que China interpreta como un gesto estratégico. El propio embajador chino en España, Yao Jing , aseguró recientemente que su país ve a España como un “puente hacia Europa” , destacando las buenas relaciones bilaterales y el papel del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero como facilitador de este giro diplomático.

Las inversiones chinas se disparan en España

Más allá del comercio, también crecen las inversiones chinas en territorio español. En el primer semestre de 2025, estas alcanzaron los 467,3 millones de euros , lo que supone un crecimiento del 522 % respecto al mismo periodo de 2024 . Esta cifra representa ya el 5,5 % de toda la inversión extranjera captada por España en ese lapso.

Esta penetración económica confirma que la influencia del gigante asiático en España va mucho más allá de las tiendas online: abarca sectores estratégicos, tecnológicos y políticos , en un momento clave para la redefinición de las alianzas globales.