El reciente feriado largo por la conmemoración de la Batalla de Ayacucho volvió a evidenciar el caótico panorama del transporte interprovincial en la región. La alta demanda de pasajeros y la mínima presencia de autoridades fiscalizadoras dejaron el camino libre para que empresas formales e informales vulneraran derechos, incrementaran precios y abandonaran a los usuarios en plena ruta.

Durante los días de mayor afluencia, los costos de los pasajes se elevaron sin justificación hasta S/ 150 y S/ 180, pese a tratarse de servicios regulares y sin condiciones especiales. Sin embargo, los testimonios revelan que ni siquiera el pago excesivo garantizó un viaje seguro o un cumplimiento mínimo de las obligaciones de transporte.

Una de las denuncias más graves proviene de pasajeros de la empresa

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