Venezuela emitió un comunicado oficial para “denunciar y repudiar enérgicamente” lo que califica como un “robo descarado y un acto de piratería internacional” por parte de Estados Unidos. Esta reacción surge luego de que el presidente estadounidense admitiera públicamente la incautación de un buque petrolero en el Mar Caribe.

Según el documento venezolano, esta acción confirma que la política de agresión de Washington es un “plan deliberado de despojo” de las riquezas energéticas del país.

El comunicado subraya que no es la primera vez que el presidente de EEUU confiesa sus intenciones, recordando que durante su campaña de 2024 él ya había afirmado abiertamente que su objetivo era “quedarse con el petróleo venezolano sin pagar ninguna contraprestación a cambio”.

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