Shakira regaló uno de los momentos más emotivos de su Las Mujeres Ya No Lloran World Tour durante su segundo concierto en Buenos Aires, donde sorprendió al invitar al escenario a sus hijos, Milan y Sasha.

Los niños, de su relación con el exfutbolista español Gerard Piqué, hicieron su primera aparición en la gira vestidos en tonos celestes y blancos —un guiño que no pasó desapercibido para el público argentino— para interpretar junto a su madre “Acróstico”, la balada que se ha convertido en uno de los capítulos más íntimos de la reciente etapa musical de la colombiana.

Al concluir la pieza, Milan y Sasha abrazaron y besaron a su madre. Ella recibió el gesto visiblemente conmovida ante un público que no dejó de aplaudir.

El momento formó parte del cierre de la serie de conciertos en la ca

See Full Page