El BOE ya ha publicado la nueva revisión del precio del butano y, esta vez, la noticia parece que alegrará a todos aquellos que siguen utilizando este combustible tanto en viviendas como en negocios. Según lo que se ha informado, la bombona de 12 kilos pasa a costar 15,46 euros , lo que supone un pequeño respiro para quienes siguen utilizando este gas en casa. En la revisión anterior estaba en 16,27 euros , así que la bajada es notable, casi un 5%. Puede parecer poco, pero en hogares donde el butano se usa para cocinar o calentar agua, cualquier descenso se nota a final de mes.

El Ministerio para la Transición Ecológica explica que este cambio en el precio del butano se debe sobre todo a la caída de los fletes y a que el euro ha ganado algo de fuerza frente al dólar. Y, aun así, las materias primas subieron, pero no lo suficiente como para empujar la tarifa al alza. La combinación ha permitido que se pueda dejar el precio más bajo, algo que no ocurría desde hace meses y que muchos consumidores ven ya como un alivio después de años de oscilaciones. Además, conviene recordar que las revisiones están limitadas a cambios del 5%, tanto si suben como si bajan. Es un freno pensado para evitar sobresaltos: ni grandes subidas repentinas ni desplomes que luego se compensen de golpe. Este tope, aunque a veces limita las bajadas, aporta cierta estabilidad a quienes dependen del butano de forma habitual.

El BOE confirma el giro en el precio del butano

Para entender el impacto de esta rebaja basta con repasar la evolución de la bombona en los últimos años. Antes de la pandemia, en enero de 2020, estaba en 13,37 euros, y en algunos momentos de ese año bajó incluso por debajo de los 13. Pero 2021 cambió por completo la tendencia. A medida que la energía se encareció, el precio del butano subió hasta rondar los 20 euros en varias revisiones de 2022. Aquel fue el momento más caro para los consumidores.

Luego el mercado empezó a moverse a saltos. En 2023 la bombona llegó a costar poco más de 14 euros en septiembre , aunque en otras fechas siguió subiendo. Entrar en 2024 no estabilizó la situación : nuevas revisiones, nuevas oscilaciones y una sensación generalizada de que era imposible anticipar cuál sería el precio al trimestre siguiente dado que el precio subía aunque parecía mantenerse por debajo de los 16 euros.

Y este año 2025 , subió un poco más. Enero marcó 16,64 euros; marzo subió a 17,67; mayo tocó los 18 euros y luego volvió a bajar en julio y septiembre . El giro más claro ha llegado en noviembre, con esos 15,46 euros que devuelven cierta tranquilidad a las economías domésticas.

Cuánto durará este precio

El precio actual del butano se mantendrá hasta el 20 de enero de 2026. Ese día se publicará en el BOE la siguiente revisión, y de nuevo se aplicará el límite del 5%. Si las materias primas bajan o los fletes siguen moderándose, el precio podría volver a descender. Si ocurre lo contrario, podría subir, pero siempre en ese margen tasado que actúa como freno para movimientos bruscos.

Para los consumidores es una forma de saber que, al menos durante dos meses, el precio no se tocará. No es una garantía absoluta, pero sí da un margen para organizar gastos, especialmente en zonas donde el butano sigue siendo la opción principal.

Un combustible que retrocede, pero que sigue siendo esencial en miles de hogares

El GLP envasado, principalmente butano, se usa todavía en muchos puntos del país. Zonas rurales, viviendas sin conexión a gas natural o casas donde el consumo eléctrico se intenta reducir siguen apoyándose en este tipo de envases. Aun así, el consumo lleva cayendo más de una década. Entre 2010 y 2021, el descenso acumulado superó el 25%, una cifra que refleja el cambio progresivo hacia sistemas más modernos o hacia el uso combinado de electricidad y gas natural.

Aun con ese retroceso, se consumen más de 64 millones de envases al año, una cifra que deja claro que el butano no ha desaparecido ni mucho menos. Simplemente ha dejado de crecer. Las bajadas como la actual ayudan a que muchos hogares mantengan esta opción, sobre todo cuando la electricidad sube o cuando no existen alternativas reales en su zona.

Qué puede pasar a partir de ahora

El comportamiento del mercado en los próximos meses o de hecho, los primeros de 2026, dependerá de factores externos como son el transporte, divisas, petróleo y materias primas. No hay previsiones oficiales, y tradicionalmente el precio del butano se mueve de manera independiente a otras energías. La revisión de enero será clave para saber si esta bajada se consolida o si ha sido un alivio puntual pero de momento, el BOE confirma algo poco frecuente en tiempos de inestabilidad energética: una bajada que se nota y que llega justo antes de los meses de mayor consumo.