Esa inquietud nació porque, así como ellos están en una mala situación, yo también pasé por eso.

Padecí hambre y necesidad, eso hizo que decidiera apoyar a los demás. Es algo que me gusta hacer, lo hago desde el fondo de mi corazón, en aquello que esté a mi alcance, siempre daré mi ayuda con amor.

Por ahora estoy realizándolo cada año, porque no es fácil y tampoco difícil. Se pasa tiempo planificándolo para que salga bien, ya tengo dos años con mi labor, contando con la ayuda de Dios.

Siempre lo hacemos en el lugar donde se ven más personas necesitadas, en la plaza, cerca de la estación de policía de San Fernando; preparamos unas buenas comidas para que las personas queden satisfechas. Por cierto, las bebidas con frutas no pueden faltar, es un necesario complemento.

Mientras más lo hag

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