—Usted sostiene que el objetivo del pensamiento de Xi Jinping no es iniciar una nueva Guerra Fría con Occidente ni exportar el modelo chino, sino reforzar la autoridad del Estado-Partido hacia dentro del país. ¿Cómo se traduce esta prioridad en la vida cotidiana de los ciudadanos chinos?
—La prioridad del Partido Comunista bajo Xi Jinping es mantener al Partido Comunista y a Xi Jinping en el poder, y sobre esa base, proyectar a China como líder del mundo. Y siendo ésta la prioridad, significa que todos en China en todo momento están obligados a servir a este propósito. Cuando se mira, por ejemplo, la economía, los economistas tanto dentro como fuera de China, pueden sentir que la economía china debería pasar de un enfoque en la producción, la exportación y la fabricación, hacia el consumo