Con la llegada del otoño , millones de estadounidenses vuelven a escuchar ese zumbido ensordecedor de los sopladores de hojas de los árboles que puede alcanzar los 100 decibeles, equivalente al despegue de un Boeing 737.

Los sopladores de hojas a gasolina no solo destrozan la tranquilidad de los barrios residenciales, también representan una amenaza seria para la salud pública y el medio ambiente.

Un solo operario usando uno de estos dispositivos durante una hora genera la misma cantidad de contaminantes que un auto recorriendo más de mil millas, mientras libera formaldehído y benceno, ambos carcinógenos conocidos, reporta el medio Reasons To Be Cheerful.

Lugares donde están prohibidos los sopladores de hojas

La resistencia ciudadana ha logrado que más de 100 ciudades estadouniden

See Full Page