La Sala Plena eliminó expresiones que reducían a los animales a simples medios para el hombre y declaró inexequible la obligación de invocar a Dios en el juramento de veterinarios y zootecnistas.
La Corte Constitucional de Colombia emitió un fallo histórico que refuerza la protección jurídica de los animales al reconocerlos como seres sintientes con derechos especiales . En su decisión, el alto tribunal declaró inexequibles apartes de la Ley 576 de 2000 —que regula el Código de Ética para la medicina veterinaria y la zootecnia— por considerar que reducían a los animales a meros instrumentos al servicio de los seres humanos.
El pronunciamiento se centró en el artículo 12 de dicha norma, que afirmaba que “ los animales y las plantas son medios que sirven al hombre para el mejor desarrol