1: Los hechos históricos demuestran que con los políticos criminales sí se negocia. La afirmación contraria es pura retórica que pretende ignorar las realidades concretas de cada circunstancia. Se critica y condena a la Oposición porque “negocia” con el Gobierno exigiendo elecciones libres, justas y verificables mediante suficientes condiciones y garantías irreversibles. Los que denostan ese comportamiento afirman: “con criminales no se negocia”, lo cual equivale a negar la probabilidad cierta de sustituir al régimen por la vía pacífica electoral, y hacerlo a través de la violencia armada. El detalle es: ¿con quiénes?, ¿con qué? Dudo que existan estos “insumos” dispuestos y disponibles con probabilidades de éxito.
2: Nuestro Héroe Nacional dictó un Decreto de Guerra a Muerte: “españoles y