Los activos argentinos volvieron a sufrir un duro revés en Wall Street, mientras los inversores mantienen una postura de cautela ante la proximidad de las elecciones en la Provincia de Buenos Aires .
El Gobierno, consciente de la volatilidad cambiaria, dejó en claro que la intervención directa será su herramienta principal para contener movimientos bruscos en el tipo de cambio. En la práctica, esto se traduce en que el Tesoro venderá dólares para sostener la divisa.
En la City, la medida provocó reacciones mixtas: críticas por la improvisación diaria del equipo liderado por Luis Caputo y aceptación resignada, bajo la consigna de "no queda otra".
En ese contexto, los ADR de empresas argentinas se hundieron más de un 5% en Nueva York, con. En la plaza porteña, el impacto fue