Carlos Motta Quispe, un marino en retiro, enfrenta la posibilidad de ser procesado por tentativa de homicidio calificado tras intervenir en un robo en Los Olivos, Lima. El incidente ocurrió el pasado sábado 30 de agosto, alrededor de las 7:20 p.m., cuando Motta, que circulaba en bicicleta, presenció un asalto violento a una joven. Al ver la situación, decidió actuar para protegerla.

Según su hijo, Diego Motta, el exmarino se percató de que la joven estaba en problemas y se acercó para ayudarla. "Mi papá llegó y vio que la chica estaba en el suelo", relató Diego. En medio del forcejeo con los presuntos delincuentes, Motta disparó su arma, que es de uso personal y está registrada, hiriendo a uno de los atacantes. La defensa del exmilitar argumenta que actuó en legítima defensa, ya que se enfrentó a un grupo de asaltantes.

La Fiscalía ha reclasificado el caso de lesiones graves a homicidio calificado en grado de tentativa, solicitando 18 meses de prisión preventiva. La familia de Motta sostiene que el atacante, identificado como Adriano Alexis Leiva Olortegui, tiene antecedentes por robos en la misma zona. El abogado defensor enfatizó que para calificar el hecho como homicidio calificado, se requiere demostrar ferocidad o placer en el acto, lo cual no se aplica en este caso.

Diego Motta ha hecho un llamado a la joven víctima y a un testigo que grabó el incidente para que se presenten y ayuden a esclarecer los hechos. "No necesitamos que se haga pública su nombre, solo queremos que se comunique", expresó. La situación legal del exmarino será definida por la justicia peruana en los próximos días, generando un debate sobre el uso de la legítima defensa y la intervención ciudadana en delitos públicos.