La tranquilidad en el Real Oviedo estuvo a punto de quebrarse por completo durante apenas un día. La apertura de un expediente a Haissem Hassan y su separación momentánea del grupo encendieron las alarmas en el club, aunque todo se resolvió rápidamente gracias al arrepentimiento mostrado por el atacante, quien ya se reincorporó a los entrenamientos sin incidentes.
El gesto del franco-egipcio en la celebración del gol frente a la Real Sociedad encendió un conflicto interno que agitó los despachos carbayones. El jugador trabajó al margen del plantel bajo la supervisión de un readaptador, mientras tanto tanto la entidad como el propio Hassan emitieron comunicados para pedir disculpas y rebajar la tensión.
El entrenamiento de hoy estuvo rodeado de expectación. Hassan apareció junto a vario