La tragedia se desató alrededor de las 23:35 del domingo 31 de agosto, cuando un desperfecto eléctrico en la cocina provocó el primer foco de llamas. En cuestión de minutos, las paredes y el techo de material ligero quedaron envueltos en fuego, lo que complicó el avance de los bomberos que llegaron al lugar.
Entre los escombros fueron hallados los cuerpos de los hermanos Mateo (17), Ignacio (19) y Lucas (21) Cruz Sejas. Las llamas consumieron el hogar antes de que los jóvenes pudieran escapar, y el brigadista que informó el hallazgo describió la escena como “inimaginable”.
Los padres, Carlos Cruz (45) y Fabiola Vanesa Sejas (43), lograron salir con ayuda de los vecinos y fueron trasladados de urgencia al Hospital Regional Ushuaia. Fabiola presenta quemaduras en el 16% de su cuerpo, mient