El home office se ha transformado en una de las mayores disrupciones laborales de la última década en México, reflejando tanto el avance de la tecnología como la necesidad de flexibilidad en las dinámicas de empleo . Esta realidad adquirió solidez jurídica tras una reforma a la Ley Federal del Trabajo ( LFT ), donde se le llamó “teletrabajo” .
El primer paso para entender el concepto está en el artículo 330-A , donde el teletrabajo se describe como “una forma de organización laboral subordinada que consiste en el desempeño de actividades remuneradas, en lugares distintos al establecimiento o establecimientos del patrón (…) utilizando primordialmente las tecnologías de la información y comunicación, para el contacto y mando entre la persona trabaj