La decisión del estado de Florida, Estados Unidos, de eliminar la exigencia de vacunas para los niños que asisten a la escuela generó un fuerte rechazo en la comunidad científica. La medida, impulsada por el jefe de Salud del estado, Joseph Ladapo, y enmarcada en una corriente de pensamiento antivacunas, a nula décadas de políticas sanitarias y pone en riesgo la salud de la población, según especialistas.
Esta controvertida decisión, que deja de lado la obligatoriedad de inmunizaciones contra el sarampión, la varicela, la hepatitis B y otras enfermedades, se inscribe en un clima de escepticismo creciente en torno a las vacunas, promovido por funcionarios como Robert F. Kennedy Jr., actual secretario de Salud de Estados Unidos y reconocido activista antivacunas que recientemente visit