Habían pasado seis años, pero en la memoria todavía persistía la imagen de Beret con la camiseta del Real Valladolid y micrófono en mano cantando Lo siento. Era también una noche de septiembre, una de las que nutren a la Feria y Fiestas de la Virgen de San Lorenzo , y que ayer, en cierta parte, se repitió con el artista sevillano sobre el escenario de la plaza Mayor. Un reencuentro en el que volvió a conmover a los vallisoletanos y a sus visitantes desde las letras marcadas por su sensibilidad.
Beret no dudó en mostrar su último disco Resiliencia y sus últimos sencillos como Amaneceres o Si te vuelvo a llamar , logrando hacer reflexionar a los asistentes al ‘corazón’ de la ciudad sobre el amor propio, el desamor y la muerte. Pero en su concierto también se vislumbraron aquellas