El primer punto de la agenda que el presidente Gustavo Petro tiene para mañana, tras su regreso del viaje oficial a Japón, es una reunión con sus más cercanos, encabezados por Armando Benedetti. Petro quiere explicaciones sobre la derrota que representó para su gobierno la elección de Carlos Camargo como nuevo magistrado de la Corte Constitucional a pesar de que, como no se había visto antes, sus funcionarios y él mismo se la jugaron públicamente por tratar de imponer en el Senado la candidatura de la magistrada de Buga Patricia Balanta.

Fue una derrota que el mismo mandatario atribuye a “una traición” de fichas que supuestamente sus ministros tenían cuadradas en Senado y que lo llevó a descabezar, ipso facto, a tres de sus ministros, representantes de los sectores afines de ‘la U’, los l

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