Enrique Murillo (Barcelona, 1944) es historia viva de la edición española. Traductor, autor, periodista... pero sobre todo editor, en lugares como Anagrama, nada menos que tres grandes grupos editoriales (Bertelsmann, Planeta y Santillana) o su propio sello independiente (Libros del Lince). Ha descubierto –o impulsado– a autores como Lucía Lijtmaer, Álvaro Pombo, Ray Loriga, Marina Perezagua, Ignacio Martínez de Pisón... ha traducido a Nabokov, Amis, Barnes, Capote, Anaïs Nin, Tom Wolfe... se ha paseado con Salman Rushdie en plena fetua, ha lanzado best sellers como Paula de Isabel Allende o El Rey de José Luis de Vilallonga y, en fin, ha tratado con tantos grandes editores y autores que uno podría emular aquel famoso chiste y decir ‘¿quién es aquel que está al lado de Murillo?’, como
Enrique Murillo, el editor que lo confesó (casi) todo
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