La historia de Aaron Rodgers con los Pittsburgh Steelers no pudo comenzar de mejor manera. A sus 41 años, el quarterback debutó con el pie derecho y, de paso, saboreó una especie de venganza contra su exequipo, los New York Jets.

En un duelo vibrante, Pittsburgh remontó en el último cuarto y se llevó la victoria 34-32 gracias a un gol de campo decisivo en el minuto final.

El mariscal mostró un nivel espectacular: completó 22 de 30 pases, acumuló 244 yardas y lanzó cuatro pases de touchdown sin intercepciones. Su sociedad con DK Metcalf, el nuevo receptor estrella de los Acereros, dejó destellos de lo que puede ser una dupla demoledora: cuatro recepciones para 83 yardas, incluyendo una atrapada de 31. Las anotaciones, sin embargo, se repartieron entre Calvin Austin III, Jaylen Warren, Jon

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