La puntualidad sigue siendo un reto para muchos mexicanos. ¿Será ésta una característica cultural o simplemente una costumbre arraigada? En este análisis descubrimos por qué, en ocasiones, el tiempo parece correr distinto en nuestro país.
La impuntualidad, casi un sello cultural
No es raro escuchar que “la impuntualidad es sinónimo de la mexicanidad”. Hay quienes atrasan sus arribos intencionalmente, mientras que otros simplemente se distraen entre tantas ocupaciones. Desde reuniones familiares hasta salidas casuales, muchos llegan con retraso—no minutos, sino incluso horas—como si su reloj interno marcara otra hora.
“Ahorita” y “al ratito”: el lenguaje que aplaza
Expresiones como “ahorita”, “al ratito” o “más tarde” funcionan como comodines temporales que postergan compromisos sin un