Historias demasiado humanas

¿Qué haces frente a algo que no tiene arreglo? ¿Te enojas, lo niegas, sigues intentando como si todavía hubiera esperanza? Hay un viejo chiste que lo resume bien.

Un hombre tenía incontinencia urinaria. Un amigo le recomienda un sicoanalista. Años después, se cruzan:

-“¿Arreglaste tu problema?”.

-“No- dice el hombre-, pero ahora sé por qué me hago encima”.

Imaginemos que el amigo le hubiera recomendado un terapeuta conductista. Meses después se encuentran:

-“¿Arreglaste tu problema?”.

-“No, me sigo haciendo encima… pero ahora uso pañales”.

Y en la tercera versión, el hombre va a un terapeuta gestáltico. Tiempo después, el amigo pregunta:

-“¿Arreglaste tu problema?”.

-“No, me sigo haciendo encima… pero ya no me importa”.

Más allá del chiste, hay algo p

See Full Page