“Hubo un momento en que me miraba al espejo y me encontraba muy distante de mí misma. ¿Quién soy? ¿Qué son estas capas de plástico que me puse? Decidí aventurarme a descubrir quién era, pero sin todas esas cosas externas, sin esos suplementos”, confesó Vanina Ayelen Sánchez , de 31 años, una de las mujeres que forman parte de la creciente ola de personas que, luego de llevar durante años implantes mamarios, optan por removerlos y redescubrirse. “Hoy me doy cuenta que mi vida no pasa por ahí para nada”, agregó Valeria Molina , de 51 años, cuya historia de explantación también implica una transformación profunda.

Ambas hablan en primera persona sobre sus miedos y el deseo de encontrar una imagen más natural, alineada con su nuevo presente. “Era como si hubiera una carencia en mí, como s

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