Se abren las puertas del e Iryna Zarutska ingresa al vagón. Viste una playera y una gorra color negras, así como un pantalón caqui. En las manos lleva su celular al que estaban conectados los audífonos que portaba en los oídos. Sin saberlo, se sentó en el asiento delante del que iba Decarlos Brown Jr ., su asesino.

Él, con una sudadera roja, se encontraba con la cabeza recargada sobre el vidrio de la ventana, hasta que se percata de la llegada de la joven. La observa y se talla un poco los ojos con una sola mano. Mientras Iryna continúa usando su celular, Decarlos saca una de su bolsillo y desenvaina el filo. Intenta disimular, pero de inmediato se levanta de su asiento y violentamente esgrime el ataque contra la mujer.

Luego de recibir la puñalada en su cuello, Iryna volteó a

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