La libertad de prensa en Estados Unidos enfrenta un nuevo desafío. El gobierno de Donald Trump, a través del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), presentó una propuesta para limitar la duración de las visas que permiten a periodistas extranjeros trabajar en el país.
La iniciativa, anunciada a finales de agosto, plantea reducir las estancias a 240 días, con posibilidad de prórroga bajo un estricto escrutinio. En el caso de reporteros de nacionalidad china, la restricción sería aún mayor y de tan solo 90 días.
El DHS informó que existe la posibilidad de enviar comentarios en línea sobre los cambios antes de la fecha límite del 26 de octubre.
Hasta ahora, el esquema de la visa I —diseñada especialmente para corresponsales— ha permitido extensiones de hasta cinco años.
“ Al pasar años