Ciudad de México.– Palacio Nacional fue ayer el punto de encuentro para la agenda de seguridad de Chihuahua. Desde la Ciudad de México, la gobernadora Maru Campos Galván y el alcalde de Ciudad Juárez, Cruz Pérez Cuéllar, pusieron sobre la mesa la urgencia de redoblar esfuerzos contra la violencia en el estado fronterizo.

Maru Campos llegó acompañada de su equipo de seguridad y justicia: el secretario de Seguridad Pública, Gilberto Loya, y el fiscal general, César Jáuregui. La mandataria estatal intercambió impresiones con la presidenta Claudia Sheinbaum, en un diálogo que -según trascendió- estuvo centrado en los decomisos de fentanilo y armamento en Chihuahua, además de peticiones especificas en la materia. Campos subrayó que mantener la paz en el estado “no es una meta alcanzada, sino

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