El aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas ha vivido este domingo una nueva jornada de caos debido a la huelga indefinida convocada por los 800 vigilantes de seguridad de la empresa Trablisa, encargados de los controles de pasajeros. La protesta, motivada por la falta de acuerdo en las negociaciones laborales, ha provocado colas kilométricas que llegaban hasta las entradas de las terminales y retrasos de hasta 95 minutos en los filtros de seguridad.

A primera hora de la mañana, los tiempos de espera superaban la hora y media tanto en el acceso general como en el fast track, cuando hace apenas una semana la media rondaba los diez minutos, según datos de El Periódico .

En un comunicado difundido en X, Aena advirtió de que “los tiempos de paso podrían verse incrementados” y pidió disculpas a los usuarios. Pese a que la Delegación del Gobierno en Madrid ha decretado servicios mínimos del 100% , las aglomeraciones no se han evitado y numerosos pasajeros compartieron imágenes en redes sociales para advertir a otros viajeros.

Entre los afectados por las demoras se encontraba el equipo del CD Leganés , que tenía previsto viajar a Granada.

Las demandas de los vigilantes

La huelga estalló tras el fracaso de las negociaciones entre Trablisa y los trabajadores . Los vigilantes reclaman:

  • Una mejora salarial acorde con la responsabilidad del puesto.

  • La creación de un “plus Madrid” por prestar servicio en el principal aeropuerto del país.

  • Un incentivo económico para quienes no registren ausencias en el mes.

  • La creación de un comité de centro para mejorar la comunicación con la empresa.

  • Que los días de incapacidad laboral no computen como déficit de jornada .

Más allá de la protesta laboral, la situación del aeropuerto ha suscitado críticas de sindicatos policiales y de la Guardia Civil. Desde Jucil denunciaron la presencia de ratas en las instalaciones , lo que, aseguran, supone un riesgo añadido para la seguridad de los agentes y trabajadores.

El caos se produce en un momento de máxima afluencia. Según Aena, el aeropuerto de Barajas registró en agosto 6,24 millones de pasajeros , un 2,8% más que el año anterior, consolidándose como la principal puerta internacional a España. Le siguen Barcelona-El Prat (5,67 millones, +5%) y Palma de Mallorca (4,75 millones, +2,4%).