Con el aumento de la densidad poblacional en las principales ciudades del país, cada vez se ha hecho más común que muchas personas elijan la propiedad horizontal para residir.
Este tipo de agrupación permite que muchas familias puedan compartir espacios públicos, pero también que puedan tener unidades habitacionales privadas.
Aunque vivir en este tipo de propiedades trae beneficios, lo cierto es que también se deben cumplir ciertas normas que están consignadas en la Ley de Propiedad Horizontal, que es la Ley 675 de 2001, la cual contiene algunas directrices en materia de organización, administración y convivencia de los habitantes.
Sin embargo, el conjunto también es autónomo en definir algunas normas para garantizar la convivencia de los residentes, que no están expresas en la legisl