El futuro de Machu Picchu se encuentra en el centro de un intenso debate internacional. La organización New7Wonders, que en 2007 designó a la ciudadela inca como una de las Nuevas 7 Maravillas del Mundo, ha advertido que el sitio podría perder este reconocimiento si no se abordan problemas críticos en su gestión y conservación. Esta advertencia fue emitida desde Zúrich, donde la organización cuestionó la sostenibilidad de las políticas aplicadas en el Santuario Histórico.

En su comunicado, New7Wonders enumeró diversas fallas, como la regulación del turismo, denuncias de venta irregular de boletos y deficiencias en el transporte. Además, mencionó conflictos sociales que, según la entidad, “ponen en riesgo la credibilidad” de Machu Picchu como ícono mundial. Jean-Paul de la Fuente, director de New7Wonders, enfatizó que la situación no solo afecta la infraestructura, sino también la percepción global del Perú. "De no atenderse oportunamente, estos factores podrían seguir afectando la imagen del Perú a razón de la mala experiencia de los visitantes", advirtió.

En respuesta, el Ministerio de Cultura (Mincul) de Perú emitió un pronunciamiento en el que evitó referirse directamente a New7Wonders. En cambio, destacó el papel de la UNESCO como la única entidad competente para supervisar la protección del patrimonio cultural y natural. "La UNESCO es el único organismo competente para promover la identificación, protección y preservación del patrimonio cultural y natural", indicó el ministerio.

El Mincul también recordó que Machu Picchu fue inscrito en 1983 como Bien Mixto en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO. Afirmó que el Santuario Histórico no está en la "Lista del Patrimonio Mundial en Peligro" y que la conservación del sitio no está siendo vulnerada. En julio de 2025, durante la 47ª reunión del Comité del Patrimonio Mundial en París, se reconocieron los avances en la gestión y conservación de Machu Picchu.

El ministerio subrayó que ha llevado a cabo iniciativas conjuntas con la UNESCO, como la Primera Escuela Internacional de Campo sobre turismo responsable y sostenibilidad, que reunió a 40 expertos. Estas acciones, según el Mincul, reflejan el compromiso del Estado para proteger Machu Picchu y garantizar su integridad para las futuras generaciones.

Mientras New7Wonders exige un plan estratégico urgente y ha presentado propuestas a las autoridades peruanas, el Estado sostiene que la gestión del sitio cuenta con reconocimiento internacional y que su conservación no está en riesgo. El comunicado de Zúrich concluyó con un llamado a las autoridades peruanas para redoblar esfuerzos en la gestión integral de Machu Picchu. Por su parte, el Ministerio de Cultura reafirmó su compromiso de trabajar con entidades nacionales e internacionales para salvaguardar el santuario.