D urante años, Aaron Judge fue sinónimo de poder tanto en el bate como defendiendo el jardín derecho de los Yankees de Nueva York . Su brazo era una advertencia constante para quienes se atrevían a correr bases y su sola presencia bastaba para infundir respeto. Sin embargo, esa seguridad se ha desvanecido, la distensión de su codo derecho lo mantuvo alejado del fildeo durante semanas y ha alterado la forma en que lo ven sus rivales.
Mientras los Yankees intentan mantenerse competitivos en una temporada llena de altibajos, el estado físico de su capitán se ha convertido en la mayor preocupación, ya no se trata solo de si puede batear con poder, sino si es capaz de cumplir con el rol defensivo sin poner en riesgo su salud ni comprometer las aspiraciones del equipo.
Aaron Judge hoy: