La Policía Nacional del Perú (PNP) ha oficializado el pase al retiro del teniente general Víctor José Zanabria Angulo, quien hasta ahora ocupaba la comandancia general. Esta decisión fue formalizada a través de la Resolución Directoral N.° 009253-2025-DIRREHUM-PNP, emitida el 15 de septiembre. Según el documento, Zanabria entrará en un periodo de adaptación a la vida civil desde el 1 de octubre hasta el 31 de diciembre de 2025, marcando el final de una carrera de cuatro décadas en la principal fuerza de seguridad del país.
El oficial cumplirá 40 años de servicio el 1 de enero de 2026, y la resolución le concede tres meses de transición sin nuevas funciones asignadas. Esta información fue comunicada al Ministerio del Interior mediante el Oficio N.° 771-2025-CG PNP/SEC, para que se informe a la presidenta Dina Boluarte, quien es la jefa suprema de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional.
La salida de Zanabria se produce tras la decisión de la jueza Janet Lastra Ramírez, del Juzgado de Investigación Preparatoria para casos de Corrupción de Funcionarios de Arequipa, quien acogió el pedido de la Fiscalía y suspendió al general durante 18 meses de sus funciones. Esta suspensión está relacionada con una investigación por presuntos delitos de peculado, colusión agravada y abuso de autoridad en el caso conocido como “policías albañiles”.
Este caso involucra hechos que fueron reportados por primera vez en 2020, cuando Zanabria lideraba la IX Macro Región Policial de Arequipa. Según la hipótesis fiscal, durante su gestión, seis suboficiales fueron obligados a realizar trabajos de albañilería, electricidad y gasfitería en instalaciones policiales, a pesar de que su labor asignada era el patrullaje.
Testimonios clave han sido presentados al Ministerio Público, incluyendo la declaración de la mayor Claudia del Castillo, exjefa del Escuadrón Verde de Arequipa. Ella afirmó que recibió órdenes directas de Zanabria para solicitar agentes con habilidades técnicas, bajo el pretexto de reforzar patrullajes. Otro testimonio relevante proviene del maestro de obra Claver Colquehuanca, quien aseguró haber recibido más de S/17 mil por servicios en la remodelación de una estructura policial, superando el presupuesto acordado, y con instrucciones de Zanabria para devolver parte del dinero. Según Colquehuanca, Zanabria le dijo: “Cóbralo, te haces del cobro de lo que te corresponde y el resto me lo das”.
Con la salida de Zanabria, el general Óscar Arriola asume como nuevo jefe de la PNP. De acuerdo con el Decreto Legislativo 1149, el jefe del Estado Mayor debe asumir provisionalmente la comandancia general en casos de suspensión o imposibilidad del titular. Arriola ha liderado la Dirección Nacional de Investigación Criminal (Dirnic) y la Dirección Contra el Terrorismo (Dircote), y ha sido vocero institucional. Sin embargo, también ha enfrentado críticas, siendo señalado por presuntamente intimidar a testigos protegidos en el marco de la investigación por el caso Ícaro.
El fiscal Carlos Ordaya, parte del Equipo Especial de Fiscales contra la Corrupción en el Poder (Eficcop), ha formalizado una denuncia penal contra los suboficiales Jesús Guerrero Rodríguez y Jhonny Olano Tito, acusados de obstrucción a la justicia, marcaje y amenazas contra un testigo protegido en el caso Ícaro. Guerrero Rodríguez, encargado de la seguridad del testigo, realizó preguntas específicas sobre el exjefe de la Diviac, Harvey Colchado, lo que el testigo interpretó como una posible solicitud de información a favor de los superiores policiales, incluyendo a Zanabria y Arriola.