El 19 de mayo de 1961, hace 64 años, la nave Venera 1 se convirtió en el primer ingenio humano en sobrevolar otro planeta, Venus. Pero la nave enviada por la URSS fracasó en su objetivo de enviar datos a la Tierra.
Una nave Venera 1 en el Museo Astroanáutico de Moscú (DPA).
La sonda consistía en un cuerpo cilíndrico, coronado por una cúpula, de 2,35 metros de altura y 1,50 metros de diámetro. La masa de combustible era de 643,5 kilos. Dos paneles solares, con una superficie total de 2 metros cuadrados, se extendieron en forma radial desde el cilindro.
Una antena desplegable de 2 metros de diámetro fue diseñada para las comunicaciones con un transmisor de 8 centímetros y 32 centímetros de longitud de onda.
La nave enviada por la URSS fracasó en su objetivo de enviar datos de Venus.