El actor, director y productor Robert Redford, que era a la vez el galán por excelencia de Hollywood y un influyente defensor del cine independiente a través de su Instituto Sundance, murió a los 89 años.
Considerado en su día "un rubio californiano más", Redford se convirtió durante medio siglo, gracias a su encanto y su aspecto, en uno de los protagonistas más rentables de la industria y en uno de los astros del cine más reconocidos y queridos del mundo.
Redford aceleró el latido de los corazones en papeles románticos como "África mía", se puso político en "El candidato" y "Todos los hombres del presidente" y desvirtuó su imagen de chico de oro en papeles como el de excampeón de rodeo alcohólico en "El jinete eléctrico" y el del millonario de mediana edad que se ofrece a comprar sexo e