Con la llegada del calor, las piletas se convierten en el centro de los hogares argentinos. Sin embargo, antes de llenarlas y empezar a disfrutar, los especialistas insisten en la importancia de planificar tareas de mantenimiento, pintura y refacciones estructurales, que pueden significar una inversión de millones de pesos.
Las fisuras en piletas de ladrillo exigen un trabajo profundo: retirar el revoque, reparar la estructura, impermeabilizar y volver a revocar. El costo ronda los $ 4.000.000. Si la renovación incluye un cambio estético, el revestimiento veneciano es la opción más buscada, con un precio de $ 70.000 por metro cuadrado incluyendo materiales y mano de obra. Los expertos aconsejan iniciar estas obras apenas finaliza la temporada para evitar demoras.
Pintura y mantenimiento