El expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, fue trasladado de urgencia a un hospital en Brasilia debido a problemas de salud. Su hijo, el senador Flavio Bolsonaro, informó que su padre comenzó a sentirse mal repentinamente, presentando "hipo severo, vómitos y presión arterial baja". Este incidente ocurrió mientras Bolsonaro se encontraba bajo arresto domiciliario tras ser condenado a 27 años y tres meses de prisión por conspirar contra el orden democrático tras su derrota en las elecciones de 2022.
Bolsonaro, de 70 años, fue condenado el 11 de septiembre y se encuentra en prisión domiciliaria desde agosto. Durante su traslado al hospital, estuvo acompañado por agentes penitenciarios que custodian su hogar. Flavio Bolsonaro pidió oraciones para su padre, deseando que su estado de salud no sea grave.
El exmandatario había sido condenado por liderar una organización criminal en un intento de aferrarse al poder tras perder las elecciones ante Luiz Inácio Lula da Silva. Desde su condena, ha enfrentado problemas de salud recurrentes. En su primera salida del arresto domiciliario, Bolsonaro fue escoltado por un fuerte dispositivo de seguridad y llegó al hospital privado DF Star, donde se le esperaba por un grupo de seguidores.
El juez Alexandre de Moraes, encargado del caso, otorgó el permiso para que Bolsonaro se sometiera a un procedimiento médico ambulatorio. Este procedimiento incluye la extracción de un nevo melanocítico y una biopsia de una lesión cutánea. Se considera un procedimiento sencillo, y los médicos le han indicado que debe presentar un parte médico en un plazo de 48 horas después de la intervención.