CIUDAD DE MÉXICO.- Hace apenas diez años, llevar el teléfono al baño era considerado extraño. Hoy, sin embargo, para muchas personas es casi automático: abrir redes sociales, leer noticias o responder mensajes mientras se está sentado en el inodoro. Lo que parecía una costumbre inofensiva ha despertado la curiosidad de los científicos, que ahora analizan sus posibles efectos sobre la salud.
El hábito del móvil en el baño: un riesgo inesperado
Investigadores del Beth Israel Deaconess Medical Center, en Estados Unidos, estudiaron si este comportamiento podía relacionarse con un problema frecuente: las hemorroides. Para ello, entrevistaron a adultos que acudían a colonoscopías de rutina, preguntando específicamente por su uso del smartphone en el baño. El objetivo no solo era conocer la