El Castillo de Windsor , bastión de la monarquía británica, fue el escenario de un banquete ofrecido por el rey Carlos III al presidente estadounidense Donald Trump para celebrar la "relación especial" entre ambos países. Contó con la presencia notable de magnates tecnológicos de Silicon Valley.
La velada comenzó con una bienvenida formal en el castillo , donde Trump y la primera dama Melania fueron recibidos por el rey Carlos III y la reina Camilla. Según informes, el presidente estadounidense llegó en medio de una manifestación de 5.000 personas en Londres contra el racismo y las políticas antimigratorias que impulsa el republicano, pero el ambiente en Windsor fue de cordialidad.
El rey, en su discurso de apertura, enfatizó el "vínculo duradero" entre las nacion