Este es un espacio de debate que no compromete la opinión de La Silla Vacía ni de sus aliados.
En la discusión sobre cómo regular a las grandes plataformas tecnológicas, los gobiernos suelen partir de un diagnóstico legítimo: el enorme poder de las BigTech y sus riesgos para la competencia, la privacidad y la democracia. Sin embargo, lo que a menudo se pasa por alto es que esas macroregulaciones —pensadas para limitar la concentración y disciplinar al mercado— terminan tocando otras dimensiones sensibles del ecosistema digital. Una de las más frágiles es, precisamente, el espacio que utilizan organizaciones de la sociedad civil para articular denuncias, generar debates y ofrecer alternativas ciudadanas.
La reciente decisión de Meta de poner fin a toda publicidad política, electoral y sob