En estas mismas páginas de La Vanguardia se ha escrito mucho sobre el plan Kanpai contra la delincuencia protagonizada por los multirreincidentes. Hay tantas cifras que cualquiera podría ser titular. Pero la esencia de estos dispositivos es hacer entender a la ciudadanía y al colectivo de ladrones que ya no se mira hacía otro lado y que en cualquier momento en el transcurso de una identificación puede terminar la impunidad.

El viernes pasado por la noche y madrugada del sábado, los Mossos d’Esquadra desplegaron el octavo plan Kanpai, centrado en esta ocasión en los receptadores, las personas que compran material robado a los ladrones, sin interesarse por el origen.

Un dispositivo en el que participaron cerca de un millar de policías, más Policía Nacional, policías municipales y segurid

See Full Page