El caso de ‘Milagros’ , una perrita que logró sobrevivir tras ser sometida a un procedimiento de eutanasia de forma casera, ha despertado rechazo y solidaridad en Popayán. Sin embargo, defensores de animales señalan que la administración municipal no ha brindado la atención necesaria frente a la grave situación.
Organizaciones animalistas aseguran que el abandono institucional ha obligado a ciudadanos y voluntarios a asumir los gastos médicos y el cuidado de la perrita, cuyo caso refleja la falta de políticas claras para la protección y bienestar animal en la ciudad.
La historia de Milagros no solo expone la crueldad a la que fue sometida, sino que también abre un debate sobre el papel de las autoridades en la defensa de los animales, en un momento en el que cada vez más ciudadanos exi